Cuando un emprendedor se plantea por primera vez una idea de negocio, es difícil trasladar inicialmente el proyecto que tiene en su cabeza a la realidad, y ver que pueda ser rentable a corto o medio plazo. Las escuelas de negocio enseñan estrategias y metodologías que pueden asegurar que una iniciativa pueda llagar a tener éxito.
¿Existirá alguna metodología que sea al menos, «casi perfecta», que nos diga si realmente una idea puede ser viable? En 2008, cuando nadie esperaba una respuesta a esta pregunta, nació lo que luego se conocería como modelo Canvas.
Ésta metodología, desarrollada por Alexander Osterwalder, está consolidándose como una estrategia real para agregar valor a las ideas de negocio. El estudiar si una idea de negocio es viable o no, es tarea obligada para el emprendedor, y no suele ser tarea sencilla. Sin embargo, el modelo Canvas es una herramienta lo suficientemente sencilla como para ser aplicada en cualquier escenario: pymes y grandes empresas, independientemente de su estrategia de negocio y público objetivo.
La sencillez del modelo Canvas, clave de su éxito
Uno de los puntos más importantes de la idea de Osterwalder fue la simplificación de la metodología. Estos son los 9 pasos de la metodología Canvas:
- Segmentar los clientes, para conocer el nicho de mercado y las oportunidades de nuestro negocio.
- Definir bien la propuesta de valor, es decir, saber por qué somos innovadores, qué nos diferencia de nuestra competencia y que nos acerca a potenciales clientes.
- Delimitar los canales de comunicación, de distribución y de publicidad que seguiremos, para fortalecer nuestra marca e idea de negocio.
- Definir la relación que mantendremos con los clientes.
- Determinar las fuentes económicas de nuestra idea de negocio.
- Identificar los activos y recursos clave que necesitaremos para llevar a cabo la idea empresarial.
- Conocer las actividades clave que darán valor a nuestra marca, y saber las estrategias necesarias para potenciarlas.
- Tener en cuenta los socios clave o proveedores con los que establecer contactos y alianzas para el negocio. A esto se le llama hoy estrategias de networking.
- Definir la estructura de costes, para saber el precio real que tendrá que pagar el cliente por el producto o servicio que ofrezcamos.
Para identificar los pasos necesarios para aplicar el modelo Canvas en nuestro negocio, podemos guiarnos por el siguiente esquema, difundido por la plataforma Innovación Chile
¿Será el modelo Canvas la metodología definitiva para poder agregar valor a nuestras ideas de negocio con éxito? De momento, la fama que está alcanzando su propuesta nos hace albergar esperanzas sobre su buen funcionamiento en las ideas empresariales. La sencillez parece ser la clave de su éxito.
Fuente: innovacion.cl